Las luces dicroicas iluminan una
rockola , un reloj verde
fluorescente cuelga de una pared naranja. Cada tanto, una imagen del
sitio web de Unión-Pro se ve proyectada en un rincón. La sala podría
simular cualquier
pub de Las Cañitas. Pero es la entrada de un
lujoso laberinto donde conviven empresas, diseñadores, empleados y
cientos de computadoras: el búnker de Francisco de Narváez; el centro de
operaciones de
Juan José Alvarez, el diputado que comanda su campaña.
Es
el mismo que quiere renovar su banca, que tuvo alto perfil y que fue
eje de polémica cuando se supo que había trabajado en la SIDE.
Califica
la campaña de "atípica". Dice que la inseguridad es su "mayor
preocupación", insiste en que Narváez "está segundo" y admite que ir sin
candidato presidencial es "un gran riesgo". Evita críticas, reivindica a
Eduardo Duhalde y habla de un "gran déficit": la "atomización"
opositora. "Hay que mostrar alternativas. A veces hay una oposición sólo
para la tribuna", cuestiona el hombre que, en 2005, comandó otro
búnker: el de Hilda Duhalde, "Chiche".
-¿Es diferente la campaña? -Absolutamente.
Es atípica. Hay muy poco clima en la calle. Tal vez los candidatos no
entusiasman o se ve el resultado puesto... Igual el plan no cambia.
-¿Cuál es el plan? -Lograr
que la gente reconozca los candidatos. Y resolver cómo hacer campaña
sin postulante presidencial. Era un riesgo y hay un costo: perder la
tracción que significa la elección nacional.
-Igual todo parece definido. -Es
cierto que hay un candidato fuerte. Pero la gente ve que Narváez es una
alternativa. Está en un claro segundo puesto. Vamos a ver hasta dónde
crecemos. Eso si, no vamos a utilizar campaña sucia.
-¿Lo dice por la difusión de su trabajo en la SIDE? -No. No tengo rencor con esas cosas. No ayudan a nadie, ni siquiera a quien las hace.
-Lo cierto es que bajó el perfil... -No creo que tenga que hablar para aparecer. Me verán en los lugares que solía frecuentar.
-¿El gran eje de la campaña es la inseguridad? -Es mi gran preocupación.
-¿Hay solución posible? Usted pasó por todas las áreas -No
es tan así. No estuve tanto. Era de perfil alto y parece que hubiera
estado siempre, pero las dos veces en la provincia estuve 40 días. Pero
soluciones hay. Persisten cuestiones sociales de fondo, pero lo policial
es importante. Tiene que haber una fuerza comandada por un jefe y
controlada. Pero presente.
-¿Mano dura? -Es un
slogan . No me gusta. Hay que cumplir la ley, empezando por la policía.
-¿Qué opina del Gobierno? -El
gran déficit es de la oposición. El oficialismo tiene público y
adhesión. En la oposición queda un enorme camino por construir y en
estas elecciones no pasó.
Juan Pablo Morales